Algunas mujeres sé que querrán apedrearme con esta expresión; sin embargo les ruego que lean lo que sigue antes de juzgar el enunciado, pues como mujeres nos conviene.
Algunos hombres estarán diciendo ¡amén pastora gloria a Dios! Ja ja y espero que sigan diciendo lo mismo al terminar de leer.
Esta frase se ha repetido por muchos años, en muchas iglesias y en diferentes contextos. Y yo estoy de acuerdo con lo que la Biblia nos enseña en Efesios 5:22-24 diciendo: "Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor; porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su Salvador. Así que, como la iglesia está sujeta a Cristo, así también las casadas lo estén a sus maridos en todo." Es un mandato bíblico chicas...
Ahora bien, las mujeres no tenemos ningún problema en sujetarnos a nuestros esposos cuando ellos cumplen la parte del mandato que les corresponde. Efesios 5:25-31 dice así: "Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra, a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha. Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama. Porque nadie aborreció jamás a su propia carne, sino que la sustenta y la cuida, como también Cristo a la iglesia, porque somos miembros de su cuerpo, de su carne y de sus huesos. Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne." Note por favor que el mandato es más extenso para el hombre que para la mujer...
Entonces, digo de nuevo, para una mujer es fácil sujetarse a un esposo que también cumple el mandato divino de amarla "como Cristo amó a la iglesia y se entregó por ella...".
En muchos contextos se le exige a la mujer "que se someta a su marido"; "que se sujete"; "que respete la autoridad de su marido..." Y estoy de acuerdo; pero se les ha olvidado decir la parte más amplia del mandamiento y es que el marido debe AMAR a su esposa... Es una sujeción mutua tal como comienza el pasaje en Efesios 5:21 diciendo: "Someteos unos a otros en el temor de Dios." esta frase es la introducción del mandato tanto para el hombre como para la mujer. El que una mujer se sujete no se trata de humillarse o ser esclava de un hombre frío y descuidado. Se trata de respetar y honrar a un hombre que cumple el mandato divino de amarla, respetarla y cuidarla. Si el hombre se somete en amor hacia su esposa, la mujer se someterá en respeto hacia su esposo. Dios hace las cosas de manera muy funcional, justa y equitativa.
Hombres ¿Quieren ver en casa a una esposa sumisa, atenta y respetuosa? ¡ÁMENLA Y CUÍDENLA! Les aseguro que no falla la fórmula bíblica. Y mujeres ¿Quieren ver un esposo que las ame y las cuide? RESPÉTENLO tal como el Señor nos pide y con paciencia recogerán el fruto.
Yo puedo decir que soy inmensamente feliz y no tengo ningún tipo de problema en someterme a mi esposo, porque es un hombre tierno, atento y amoroso. Y yo sigo en la lucha cada día para respetarlo, honrarlo y valorarlo como el regalo de Dios que es.
"Por lo demás, cada uno de vosotros ame también a su mujer como a sí mismo; y la mujer respete a su marido." Efesios 5:33
Vamos a vivir el matrimonio tal y como Su diseñador lo creó... ¡En amor y respeto!
Pastora y Consejera Familiar